Que tu hijo de 15 años no quiera ir al colegio puede ser preocupante, pero es importante manejarlo con calma y estrategia. Aquí hay pasos clave que puedes seguir:
-
Escucha sin juzgar: Pregúntale con tranquilidad por qué no quiere ir. A veces puede haber razones ocultas como bullying, ansiedad, problemas con amigos o dificultad académica.
-
Evalúa la causa: Según lo que te diga, trata de identificar si el problema es emocional, social o académico. No lo minimices.
-
Habla con el colegio: Consulta con profesores o el orientador escolar. Ellos pueden ofrecer una perspectiva distinta y ayudarte a encontrar soluciones conjuntas.
-
Considera ayuda profesional: Si hay señales de depresión, ansiedad o rechazo escolar fuerte, un psicólogo infantil o adolescente puede ser muy útil.
-
Establece límites con comprensión: No se trata de obligar con castigos, pero sí de dejar claro que la educación es una responsabilidad. Negocia soluciones temporales si hace falta (como reducir carga o cambiar de modalidad).
-
Explora alternativas: En algunos casos, cambiar de colegio, modalidad (presencial/virtual) o incluso considerar escuelas con enfoques distintos puede ser una buena salida.
Si el problema es académico, es importante usar palabras que le transmitan apoyo y comprensión, no presión. Aquí tienes una manera de hablar con él:
1. Valida sus emociones:
“Me doy cuenta de que te está costando el colegio y sé que no es fácil. No estás solo en esto.”
2. Refuerza tu apoyo incondicional:
“No me importa que no seas perfecto en los estudios, lo que me importa es que estés bien y que sepas que estoy aquí para ayudarte.”
3. Desactiva la presión:
“No espero que seas el mejor, solo quiero que poco a poco vayas encontrando tu ritmo. Podemos buscar juntos una manera de que te sientas menos agobiado.”
4. Invítalo a participar en la solución:
“¿Qué crees que te ayudaría a sentirte mejor con las clases? Podemos probar algo nuevo, como un tutor, cambiar de grupo, o hablar con los profes.”
5. Enfócate en el futuro sin amenazas:
“Ir al colegio no es solo sacar notas, es construir opciones para tu futuro. No todo se trata de lo académico, también estás aprendiendo a enfrentar desafíos. Estoy contigo en ese camino.”
Evita frases como:
- “Tienes que ir porque sí.”
- “Todos lo hacen, tú también deberías poder.”
- “Si no vas, te irá mal en la vida.”
Aquí te ayuda a armar una conversación de como puedes hablarle
"Hijo, sé que el colegio te está costando últimamente, y no vengo a regañarte. Quiero entender qué es lo que te está pasando, porque lo que tú sientes me importa. Si hay algo que te está haciendo sentir frustrado, confundido o cansado, podemos buscar una solución juntos. No estás solo."
"No espero que tengas las mejores notas, ni que te guste todo. Pero sí quiero que sigas intentándolo, aunque sea poco a poco, porque eso te va a dar más opciones más adelante, y quiero verte con un futuro que te haga sentir orgulloso."
"¿Qué crees que está siendo lo más difícil para ti? Podemos hablar con algún profesor, buscar un tutor, cambiar rutinas… lo que necesites. Pero lo importante es que no te rindas, y que sepas que siempre te voy a apoyar."
Comentarios
Publicar un comentario